SANACIÓN CUÁNTICA

Un físico cuántico, para la persona de a pie, sería un médium que puede ver un mundo oculto que explica la realidad que vemos y tocamos.Así pues la sanación o curación cuántica sería aquella que aplica los principios de la física cuántica.

Según la física cuántica, en la escala más íntima de la realidad, las partículas están en dos sitios a la vez (superposición). Se comunican entre sí sin que importe la distancia ni las barreras que haya entre ellas (entrelazamiento), y pueden desaparecer en un lugar para reaparecer en otro (teleportación). El mundo cuántico es la base o «mátrix» sin la que no se entiende del todo el mundo grande.

Actuar en el nivel cuántico es la manera más eficaz de transformar la realidad. Sería ir al origen más profundo del trastorno.

Los fenómenos cuánticos se hallarían en la base de los procesos fisiológicos que mantienen la vida y la salud.

La habilidad de las células para producir energía y el funcionamiento de las neuronas podrían explicarse mediante fenómenos cuánticos. Aunque la producción de energía a partir de la glucosa es un proceso básico en los organismos, la química clásica no consigue explicar la increíble velocidad a la que se producen las reacciones.

Según el físico Vlatko Vedral, de la Universidad de Oxford, la habilidad de las partículas cuánticas para estar en dos sitios a la vez ayudaría a entenderlo. Esta cualidad explicaría por qué las enzimas son tan eficaces para catalizar todo tipo de reacciones químicas.

Según Luca Turin, biofísico del University College de Londres, la acción de los neurotransmisores se explica por el flujo de electrones a nivel cuántico. Y no sería de extrañar -si suceden en el corazón de las neuronas-que tuviera relación con los desconocidos vínculos entre la conciencia y el cuerpo.

TODO ESTÁ RELACIONADO

Para autores como el biólogo Bruce Lipton y el físico Amit Goswami, la física cuántica puede explicar la interacción a niveles muy profundos entre los pensamientos, las emociones y las células.

Esta interacción haría posibles los efectos beneficiosos de la meditación, las visualizaciones y las técnicas de relajación, por ejemplo. Y llegaría a afectar a procesos tan determinantes de la salud como la expresión de los genes.

Bruce Lipton, autor de Biología de la creencia (Palmyra, 2007), hace referencia al fenómeno del «entrelazamiento cuántico», por el que una partícula (por ejemplo, un electrón o un fotón) se relaciona con otras del mismo sistema sin que importe la distancia, los obstáculos o el tiempo.

Así, al meditar, el estado de armonía podría difundirse desde el cerebro al resto del cuerpo. Y no solo eso: también afectaría a las personas que rodean al meditador, como se ha probado a través de la observación de la actividad cerebral.

ES POSIBLE CURAR POR RESONANCIA

Para Lipton, al establecerse una relación entre terapeuta y paciente, si la mente (y cada una de las células) del primero se encuentra en armonía, ya está produciendo un beneficio en el segundo. Por supuesto, esto no convierte en innecesarios los medicamentos, los cambios en la dieta u otras terapias.

Lo que nos enseña el mundo cuántico es que todo en nuestro cuerpo/mente está relacionado a niveles profundos y todavía muy desconocidos. Y lo mismo se puede decir de las relaciones entre el cuerpo y su entorno.

¿Hasta dónde llega el efecto de un pensamiento, un recuerdo o una emoción? Podemos estar influyendo y, por tanto, ser influidos por las personas que nos rodean y por las formas, los sonidos, los colores o los aromas.

En palabras del físico Amit Goswami, «el mundo está constituido por posibilidades, no por eventos determinados, por lo tanto podemos elegir la salud sobre la enfermedad. Ni la enfermedad ni la curación son enteramente objetivas.»

«Las experiencias subjetivas y nuestras actitudes hacia ellas tienen un papel que desempeñar. A través de la creatividad, el activista cuántico aprende a  cambiar la actitud que le lleva de la enfermedad a la salud, y de la salud ordinaria a la salud positiva».

 

De la Revista CUERPOMENTE. Medicina cuántica: ir al origen de la enfermedad. (Claudina Navarro Walter)

 

 

 

 

 

Artículos recomendados

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

TERAPIA PARA EL CAMBIO